El Fiscal Nacional del Ministerio Público ha anunciado medidas para los imputados extranjeros sin documentos de identidad. El escenario del anuncio es el que hizo que la ley que, entre otras medidas, aumentó la pena para el homicidio de policías (la llamada Ley Naín-Retamal), se aprobara rápidamente en el Congreso, a pesar de que otros proyectos de ley similares llevan mucho tiempo durmiendo en el Parlamento. La reacción del legislador que puede ser considerada demagógica, puede entenderse –pero no justificarse– en el Congreso como órgano de representación política. El Oficio del Fiscal Nacional, creemos, se inserta en la misma lógica; pero en el caso del jefe de los fiscales, la demagogia ni siquiera puede entenderse.