A su corta edad (24 años) ha batido múltiples récords, fue campeona mundial y parapanamericana juvenil en 2017, posicionándose en la primera posición del ranking mundial adulto ese mismo año. Además, clasificó a los Juegos Paralímpicos de Río 2016, donde obtuvo el 4° lugar en su prueba, los 400 metros planos, y ganó torneos Grand Prix en Europa y México, logrando colgarse dos medallas de oro. Hace unos días se enteró de que el Comité Paralímpico de las Américas la nominó como una de las mejores deportistas paralímpicas de 2022, donde comparte puesto con destacadas exponentes del continente. Sin embargo, afirma que el camino no ha sido del todo fácil. «Soy de la Isla de Chiloé, de Castro específicamente, y una de las cosas más difíciles fue tener que dejar la isla por el deporte para avanzar en lo que yo quería, ya que allá no tenemos las instalaciones adecuadas para poder entrenar. Fue súper difícil para mí tomar la decisión de dejar a mi familia, amigos, a la isla, que me gusta demasiado», comenta. «Extraño mucho a mi familia hasta el día de hoy, esa decisión la tomé el año 2017 y todavía me cuesta el hecho de estar lejos, pero la verdad es que también se han ido cumpliendo todos los objetivos, las metas. Me ha ido súper bien. Eso también lo hace ser menos difícil, pero siempre cuesta un poco», agrega.