Como si se tratase de un guion calcado, el fiscal Morales vuelve a sonar como «el hombre de consenso» para asumir la Fiscalía Nacional. Hace siete años, la clase política –de izquierda a derecha– comenzó a cerrar filas en torno suyo. Se le presentaba en círculos cerrados como el hombre de Estado que se necesitaba para evitar que las causas de financiamiento ilegal de la política siguieran escalando, hasta desangrar al Congreso. Aunque finalmente la «operación impunidad» se concretó de todos modos de la mano de Jorge Abbott, a días de que los 17 candidatos se presenten ante la Suprema, José Morales vuelve a aparecer como el candidato con apoyos en la derecha y la centroizquierda. Entre abogados y órganos auxiliares de justicia es conocido como el «sepulturero» de las causas con personajes poderosos. Sucedió con el caso Cascadas, Colusión de las Farmacias, con el soborno de LATAM en Argentina, cuando el ex Presidente Piñera era accionista mayoritario, y hoy pasa en causas de derechos humanos. Detrás suyo está el piñerismo, al que le preocupa que un nuevo Fiscal Nacional pueda dar curso a la investigación contra el ex Mandatario por violaciones a los DD.HH. durante el estallido. No sería la primera vez en que Morales salve a Sebastián Piñera.