Muy cerca del final, la DC se fragmenta después de la renuncia de más de 800 militantes en los últimos meses, profundizando una crisis interna que implicó la reciente salida de los senadores Matías Walker y Ximena Rincón, quienes se aprestan a sellar su paso al naciente Partido Demócrata, desde donde la parlamentaria podría planear su propia candidatura presidencial. Mientras el también renunciado gobernador de la RM, Claudio Orrego, intenta construir su propio espacio pensando en una eventual carrera hacia La Moneda, los sobrevivientes de la catástrofe falangista luchan por ser los salvadores de un muy deslegitimado partido. Entre ellos, el diputado Alberto Undurraga y el senador Iván Flores- respaldado por Andrés Zaldívar y el ex Presidente Eduardo Frei- son algunos de las cartas para encabezar una colectividad que por estos días vive una situación terminal.