La realidad paralela al Mundial: oscuridad en las platas que llegan de la Conmebol ahogan al fútbol femenino

La voz de alerta la puso el club de fútbol femenino Arturo Fernández Vial, al denunciar –a través de un comunicado– el retraso del pago de sus remuneraciones desde agosto y, también, la deuda con el alojamiento donde viven algunas jugadoras. Aunque al cierre de esta nota les habían pagado hasta septiembre, les adeudan octubre y lo que va de noviembre. Hace un año un estudio de la Anjuff reveló una realidad precaria: el 90% de las deportistas no percibía pago alguno por su trabajo, y si lo recibía, era por menos de $100 mil. La situación hoy ha variado poco y nada. Y si bien se han concretado iniciativas como la reciente Ley de Profesionalización del Fútbol Femenino o los dineros de la Conmebol destinados a subvencionar los torneos profesionales de mujeres, el tema de fondo pasa esencialmente por las platas, ciertas voluntades, una brecha de género del 100% a nivel dirigencial y conflictos de intereses latentes. Una realidad que se desarrolla en paralelo con la “fiesta mundial” del fútbol masculino que nos inunda, donde se habla de millones de dólares… 

La voz de alerta la puso el club de fútbol femenino Arturo Fernández Vial, al denunciar –a través de un comunicado– el retraso del pago de sus remuneraciones desde agosto y, también, la deuda con el alojamiento donde viven algunas jugadoras. Aunque al cierre de esta nota les habían pagado hasta septiembre, les adeudan octubre y lo que va de noviembre. Hace un año un estudio de la Anjuff reveló una realidad precaria: el 90% de las deportistas no percibía pago alguno por su trabajo, y si lo recibía, era por menos de $100 mil. La situación hoy ha variado poco y nada. Y si bien se han concretado iniciativas como la reciente Ley de Profesionalización del Fútbol Femenino o los dineros de la Conmebol destinados a subvencionar los torneos profesionales de mujeres, el tema de fondo pasa esencialmente por las platas, ciertas voluntades, una brecha de género del 100% a nivel dirigencial y conflictos de intereses latentes. Una realidad que se desarrolla en paralelo con la “fiesta mundial” del fútbol masculino que nos inunda, donde se habla de millones de dólares… 

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