No solo se ha observado un aumento en la desnutrición: actualmente, uno de cada tres niños chilenos en educación parvularia padece obesidad. La malnutrición por exceso (obesidad o sobrepeso) tiene efectos negativos sobre, entre otras dimensiones, el logro educativo y la asistencia a clases (Echeverría y otros, 2014). La prevalencia de la malnutrición y la deserción escolar están estrechamente relacionadas y conforman un círculo vicioso que profundiza la vulnerabilidad social.